Comentario
En esta evolución fue fundamental la actividad de Louis Le Vau, como ya demostró en el palacio de Le Raincy, levantado en 1645 para Jacques Bordier, Surintendant des Finances. El edificio responde al esquema tradicional de planta en U, rodeada por un foso, estando la principal novedad en el corps de logis, pues en su parte central situó un salón oval dispuesto en el sentido del eje del edificio y sobresaliendo hacia el jardín, con lo que dio un paso adelante en la integración del palacio en la naturaleza. Pero acerca de esta novedad, ha de señalarse también que Bernini ya había dispuesto en el Palacio Barberini de Roma un salón oval en el ala principal del edificio, aunque la intención de uno y otro sea diferente. Por otra parte, en la composición del edificio Le Vau hizo resaltar la parte central al disponer en la zona superior un ático que contrasta con las partes laterales de tejados con buhardillas.Estos presupuestos los llevó más lejos en el palacio de Vaux-le-Vicomte, erigido en un tiempo récord para Nicolas Fouquet, Surintendant des Finances. El esquema que siguió fue el de Maisons-Lafitte, con un bloque de planta alargada y dos pequeñas alas en la fachada principal. Sin embargo, se acusan ciertas imperfecciones que tal vez se deban a la rapidez en los trabajos, pues la obra se le encargó en 1657 y en 1658 se estaba cubriendo, alargándose algo más la decoración interior que en 1661, fecha de la inauguración oficial, estaba casi concluida.La planta del edificio está determinada por un eje que divide el palacio en dos apparternents, de forma que uno se destinaba a la familia de Fouquet y el otro se reservaba permanentemente al rey, para que siempre que deseara acudir al lugar tuviera dispuesta una estancia. Con ello Fouquet pretendía tener favorable a Luis XIV, ya que aspiraba a ser el sustituto de Mazarino.Ese eje estaba formado por dos salones. El primero era un vestíbulo de planta cuadrada rodeado de columnas que ofrecía un aspecto de cierre tras el patio de entrada. Tras él dispuso Le Vau un salón oval, que, como en Le Raincy, también sobresalía hacia los jardines pero que en este caso estaba colocado en sentido transversal al eje del edificio. Ahora bien, esta disposición transversal y la cúpula con que se cubría, integraba mucho más el palacio en los jardines, pues después del ambiente cerrado del vestíbulo al pasar a este salón, se abría un amplio espacio hacia los lados, mientras que al frente unos grandes ventanales metían el edificio en los jardines.Al exterior, el salón oval asoma con un frontispicio que sigue claramente el del hôtel Tambonneau construido por el propio Louis Le Vau, y por encima lo cierra una cúpula mal integrada en el conjunto, quizás por la rapidez con que hubieron de hacerse las obras. Esta cúpula pudo además contribuir a la desgracia de Fouquet por resultar algo ofensivo a Luis XIV, ya que tal elemento constructivo solamente pertenecía al ámbito de Dios o del rey.El complemento indispensable del edificio era el jardín, que fue diseñado por André Le Nótre y que, según Giedion, hizo del palacio de Vaux-le-Vicomte el primer ejemplo de mansión proyectada en íntima unión y armonía con la naturaleza. Por otra parte, la decoración interior fue diseñada por Charles Le Brun, poniéndose en ambos aspectos las bases de lo que se hará en Versalles.La historia de este palacio tuvo un momento trascendental en la fiesta dada para celebrar la inauguración del edificio el día 17 de agosto de 1661. El exagerado lujo desplegado supuso una humillación para Luis XIV, que también estaba invitado a ella, lo que arrastró a la caída en desgracia de Fouquet, quien, tras un juicio irregular, fue desterrado y vio confiscados sus bienes. Tras ello, los artistas que habían intervenido en la obra pasaron a colaborar en las empresas reales, especialmente en el palacio de Versalles.